“Ahora pues, si en verdad escucháis mi voz y guardáis mi pacto, seréis mi especial tesoro entre todos los pueblos, porque mía es toda la tierra” Éxodo 19:5. Que palabras tan especiales y de animo nos da Dios “seras mi especial tesoro” yo no se usted pero yo quiero ser el tesoro especial de Dios. Sin embargo hay una condicionante en esta promesa que dice “si en verdad escuchas mi voz”. Y es que no puede ser diferente, solo aquellos que escuchan la voz de Dios pueden ser los tesoros de Dios, ¿Porque afirmo esto? Porque Dios lo dice y porque seria contrario a lo que la Biblia nos enseña en la Biblia. A Dios le agrada que seamos obedientes a su voz.
El punto principal aquí es ser o aprender ser sensibles a la voz de Dios. La voz de Dios siempre nos hablara y estará hablando a nuestros oídos pero no siempre somos sensibles a ella. Habrá un sin fin de factores que no nos permitan escuchar la voz de Dios y por lo tanto distraernos de ella. El reto principal de cada persona es el de aprender a quitar otras distracciones de nuestro alrededor y enfocarnos a escuchar la voz de Dios. A reconocer que es la voz de Dios y que no es la voz de Dios. Estamos actualmente rodeados de voces que no son las de Dios y ellas nos confundirán y distraerán de la verdadera voz de Dios y del plan que El tiene para nosotros.
La condicionante para que nos vaya bien en lo que hacemos depende directamente de que tan claro escuchemos la voz de Dios. Quien practica al oración y la búsqueda de Dios y su palabra seguramente no tendrá ningún problema para escuchar la voz de Dios con claridad. Se practica diariamente y se va perfeccionando con el caminar del tiempo. Pero la promesa es que Dios nos guiara constantemente y no nos perderemos sino que su voz nos llevara de la mano. Quien escucha la voz de Dios se mantendrá seguro y teniendo éxito en todo lo que haga, porque su promesa así lo dice. ¿Sabe usted lo que la voz de Dios le esta dictando hoy que hacer?
Pastor Israel Hernandez
“La Casa de Dios” Ministerio Hispano de Christ Church
