“Y cantaban las mujeres que danzaban, y decían: Saúl hirió a sus miles, Y David a sus diez miles” este era un canto que entonaban las mujeres de Israel y aunque parece un canto de reconocimiento también es un canto de comparación y desde mi punto de vista las comparaciones no todo el tiempo son buenas. Esto provoco que Saúl se enojara y quisiera matar a David con una lanza. Claro le podemos echar la culpa al espíritu que atormentaba a Saúl pero al final de cuentas a Saúl no le disgustaba la idea que David estuviese muerto.
Al contrario de lo que Saúl quería hacer vemos que David permaneció siempre con un corazón humilde frente a Dios y al pueblo. David no quería hacer las cosas más graves así que cuando escucho a las mujeres cantando no fue delante de Saúl y le dijo “escuchas lo que dicen”. Esto hubiese encendido más la ira y la envidia de Saúl. Creo que David entendía que todo esto que le estaba pasando era por la simple gracia de Dios en su vida y lo que había formado mucho tiempo antes desde que cuidaba las ovejas.
“Mas tú, cuando ores, entra en tu aposento, y cerrada la puerta, ora a tu Padre que está en secreto; y tu Padre que ve en lo secreto te recompensará en público.” (Mateo 6:6) Es obvio aquí que David había orado en lo secreto y ahora estaba recibiendo honor en público. A Dios le agrada la gente que reconoce a Dios primero y que guarda un corazón humilde delante de Él. Esto provocara que se reciba reconocimiento enfrente de otros. ¿Quiere Ud. ser reconocido delante de otros? Guarde entonces su corazón y hágalo para Dios no para los hombres y Dios le reconocerá delante de otros
Pastor Israel Hernandez
Ministerio Hispano "La Casa de Dios"
http://www.christchurchfw.com/lacasadedios.html
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