Me he dado cuenta que dependido del estado emocional que esto yo durante el día, será el estado emocional de mi familia y de los que me rodean. Si tengo una actitud positiva entonces todos a mí alrededor tendrán una actitud positiva, o por lo contrario si tengo una actitud negativa entonces a mí alrededor tendré actitudes negativas de las personas. En pocas palabras nosotros influenciamos nuestro alrededor enormemente por como estamos y nos sentimos. Lo triste de este asunto es que como cristianos en ocasiones nuestra influencia con otras personas en lugar de ser positiva es negativa y no ayudamos mucho.
La escritura de Números 13 nos habla de cómo estas actitudes pueden afectar la historia de un pueblo y nación. Dios envío un grupo de espías a reconocer la tierra de Israel, donde dijo que fluía leche y miel, para saber a donde llegarían pero los espías trajeron malas noticias. No se ese día se levantaron de malas o si simplemente no tenían ganas de dar buenas noticias o que pero sus comentarios influenciaron a toda una generación que estuvo caminando por 40 años en el desierto. Así es el poder de las palabras y de las actitudes.
En mi casa a pesar que si hay prohibiciones siempre hay una manera de solucionar las cosas o hacerlas que pasen. Siempre tenemos una actitud correcta y de ánimo entre unos con otros. No nos dejamos vencer por nuestras emociones y más bien trabajamos para que siempre estemos de buen ánimo. ¿Por qué? Porque queremos que ellos vean lo bueno que es Dios y como los podemos influenciar para que ese día sea un día de éxito. Si usted es hijo o hija de Dios su actitud debe ser todo el tiempo positiva sin importar que tan malo haya sido el día. Nada nos puede vencer a tener una mala actitud si Dios esta con nosotros, el hace y toma lo mejor de nosotros cada día. Si se puede!
Pastor Israel Hernández
“La Casa de Dios” Ministerio Hispano de Christ Church
http://www.christchurchfw.com/lacasadedios.html
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