La historia en la Biblia nos cuenta que en el mundo siempre ha existido hambre en la humanidad. Un hambre que ha hecho que los pueblos volteen hacia Dios y pidan por su ayuda y provisión. Lo que me doy cuenta es que Dios en cierta manera ha provocado esa hambre de manera que los hombres puedan buscar de Dios. Es como si El pusiera el hambre para que la gente puedan ver que sin Dios es muy difícil sobrevivir. No digo que Dios es malo, pero digo que Dios puede controlar las cosas para que estemos en un punto donde busquemos a Dios por alguna razón.
La historia del hijo prodigo es una historia que nos da mucho de que hablar. Dice Lucas 15:14 “Y cuando todo lo hubo malgastado, vino una gran hambre en aquella provincia, y comenzó a faltarle.” Aquí vemos que después que tiro el dinero y sus cosas por la ventana ahora le dio hambre. Inmediatamente después vemos que este hijo recordó que no tenia porque estar sufriendo cuando en la casa de su padre había que comer y veo que así nos pasa a nosotros. Cuando recordamos que en Jesús esta la vida eterna, entonces volteamos hacia El y pedimos ayuda. Que bueno, pienso yo entonces, que nos da hambre y que deseamos más de Dios y su palabra.
La palabra de Dios es vida y nos alimentan siempre. La palabra de Dios es el diario alimento que debemos de desear para poder permanecer con vida en esta tierra. Ninguna palabra de hombre nos va a satisfacer sino solo su palabra. Gracias a Dios por el hambre que tenemos de El todos los días.
Pastor Israel Hernández
“La Casa de Dios” Ministerio Hispano
http://www.christchurchfw.com/lacasadedios.html
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