Durante los
primeros días de la iglesia cristiana, los apóstoles hacían muchas actividades
que les hacia hacer mucho durante su liderazgo. Servían a los que tenían una
necesidad y enseñaban la palabra de Dios al pueblo. Esto era bastante para
ellos así que decidieron ir en búsqueda de personas que les ayudaran y aligeraran
su carga. De esta manera encontraron a Esteban, un discípulo en el que podían
confiar, el que no solamente estaba lleno del Espíritu Santo sino que también
estaba lleno de sabiduría en lo que hacia. Esteban es el prototipo del servidor que es
sirve pero que no necesariamente necesita estar trabajando en el ministerio de
tiempo completo o como pastor inmerso en la iglesia.
En este
tiempo estamos los pastores necesitados de hombres y mujeres que deseen servir
a Dios con su tiempo y talentos. No necesariamente de un servicio de tiempo
completo pero con algún tiempo para brindar ayuda. Sabemos que existe mucha
materia y recursos en la iglesia para encontrar este tipo de personas pero a
veces solo hace falta la motivación. Recuerdo una canción antigua que mas o
menos decía hacia, “yo pensé que alguien mas lo haría, pero nadie lo hizo”. Esta
canción expresa lo que en la iglesia alguna veces sucede, todos tienen una
buena intención y hasta buenos deseos pero pensamos que otros lo harán y a
veces no es así. No todos reaccionan al llamado y no están convencidos que lo
podemos hacer.
Donde quiera
que usted este ore al Señor y pídale su voluntad, tal vez le este pidiendo que
sirva en alguna área de la iglesia y usted no esta poniendo mucha atención. No
solo le conviene y es de provecho pues crecerá y se desarrollara como persona,
sino que también talvez podrá ser de una bendición para alguien mas. Dios le
usara de una manera que se pueda ver la gloria de Dios reflejada en lo que
usted lo hace. Si usted no lo hace, seguramente alguien mas no lo hará, mejor
que sea usted y no alguien mas que se quede con la bendición.
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"Edificando Vidas" |
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